sábado, 3 de febrero de 2024

Bella banalidad

¿De qué nos sirve la verdad si no nos emociona? Hasta los números tienen su belleza, y por eso Pitágoras fundó con ellos una religión. La mera obviedad nos aburre, y si amamos el conocimiento es porque está lleno de misterio y sorpresa..
No nos atraen las cosas, sino su poesía. Convertimos el interés en devoción, y el intercambio en afecto. Admiramos lo útil, pero lo que nos apasiona es lo inútil, porque transforma la trivialidad de la existencia en aventura. Por eso disfrutamos adornándonos: ahí está la espléndida banalidad de las joyas, la candorosa rudeza de los tatuajes. También disfrutamos adornando el mundo, y ahí está el enigma del arte. 
Nuestra cultura ha ensalzado el utilitarismo, sin recordar que nada humano es meramente útil, que el mundo se hace humano precisamente cuando lo llenamos de inutilidad: de exceso, de juego, de aventura, de belleza. Brillos que sabemos efímeros y fútiles, y que por eso precisamente nos seducen. «Vanidad de vanidades, y todo vanidad», se lamentaba el Eclesiastés con razón y sabiduría. Pero, ¡qué vanidad más sublime! En el fondo, no queremos tener razón, sino emoción; no queremos ser sabios, sino entusiastas. Sabemos que todo se perderá, y sin embargo seguimos luchando, fascinados por la fugaz belleza del instante. 

2 comentarios:

  1. Me conectó con Platón cuando entendí (interpreté) que cuando nos habla del lama nos habla de estados anímicos, y que la contemplación de las ideas no es más que un tipo de percepción especial que sólo podemos alcanzar mediante un estado anímico singular y especial.

    Creo que prácticamente todos los filósofos han considerado la razón un medio par alcanzar estados anímicos excepcionales. Es sensación de que de golpe comprendemos las cosas, que se nos enciende la bombilla, es sublime. Spinoza, por ejemplo, nos habla del "amor dei intellectualis". Lo de separar la razón pura (el pensamiento formal) de las emociones no se empieza a dar hasta el s.XIX y XX, y fue promovido por gente intelectualmente bastante mediocre (especialistas, positivistas, etc).

    Vaya... me he puesto muy teórico.

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    1. Bien hecho. Lo que dices es interesante. Da la impresión de que el mundo antiguo estaba más lleno de encanto, y quizá sea porque razón y emoción iban más entrelazadas. El utilitarismo rasgó ese sutil velo que empañaba el mundo...

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