viernes, 28 de febrero de 2020

Protágoras

Como Epicuro, Protágoras ha sufrido el ensañado menosprecio
de los adalides de la esencia, cosa que probablemente no le habría preocupado: buscaba el conocimiento práctico y consideraba relativa la verdad. Por ello, la historia lo relegó al olvido.


  También como en el caso de Epicuro, sus libros fueron prohibidos y destruidos, y no ha llegado ninguno hasta nosotros. Pero su figura y su mensaje no han sido borrados del todo.

Protágoras paseaba por Atenas inmiscuyéndose en las discusiones, que al parecer le encantaban. Con su genial capacidad para el argumento, demostraba hasta qué punto la verdad es relativa y depende del punto de vista. Lo hacía defendiendo convincentemente tanto una postura como la contraria. No es que negara la existencia de una verdad, solo intentaba enfatizar que lo que cuenta para la vida social es la verdad de cada uno, y la capacidad para hacerla valer. Por eso le parecía importante la educación, y vivía de sus clases de retórica, por las cuales cobraba bastante bien.

Protágoras es un precursor de los humanistas al poner al hombre en el centro del universo. Se desentendió de los dioses y prefirió dedicarse a los asuntos humanos. Conocer para vivir, platicar para vencer. Fue perseguido por quienes prefieren vencer por la fuerza.

No hay comentarios:

Publicar un comentario